Publicado el Deja un comentario

Mantén tu Luz encendida

mano delante del sol referencial

Van a querer acallar tu luz…
Para que borres de la memoria todo rastro de divinidad.
Para someterte a las leyes de la limitación que te acostumbraron a temer.
Para mantenerte cautiva y cautivo del errado enfoque de la enfermedad.
Para que mantengas las cosas como deben ser.
Para que te vuelvas egoísta de tu energía, haciéndote creer también que es “tu energía”.
Para hacer posible el exterminio de tu diferencia y de la luz infinita que te habita.


Van a querer acallar tu luz.
Quienes no asumen la verdad.
Quienes ignoran quienes son.
Quienes no agradecen el día presente.
Quienes han atesorado acá en la tierra, lo que en el cielo habita.
Quienes no se saben luz.
Quienes creen que lo intangible se compra con lo tangible.
Quienes no admiran lo distinto.
Quienes han sido criados como testaferros del sistema de cosas.
Quienes se sienten solas y solos en un mundo maravilloso y lleno de amor.
Quienes niegan la grandeza de otros negándoselas a sí mismas, así mismos.


La luz que tienes:
Dala
Regálala
Multiplícala
Transfórmala
Cuéntala
Enséñala
Gózala
Agradécela
Bendícela


La luz que habita en ti, es tu gran herencia celestial. Es un don particular que está latente en cada uno de quienes sean rectos en su camino. Es un deber y un derecho de las hijas y los hijos del cosmos unificado dentro de tu alma. La luz es la inquebrantable fe que transforma, que vence la oscuridad de la enfermedad y que colabora en la palabra creativa de reparación.


La luz que habita en ti, también es un regalo fraterno de nuestras madres ancestrales y nuestros ancestros más leales…la luz es el equilibrio de quien la ha despertado en sí y es la respuesta a miles de incógnitas que dentro de ti abundan.
La luz es un error en la negatividad y también es la vía.


¡Mantén tu luz encendida!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *